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“No estamos criadas para esto. Ahora, llegamos a octubre y las chicas dicen: ‘Estoy cansada'”. Quien pronuncia estas palabras es Leah Williamson, una de las jugadoras más influyentes del mundo, estrella del Arsenal y de la selección inglesa. El pasado 21 de abril, Leah se rompió el ligamento cruzado anterior de la rodilla derecha. Ella, junto a otras 36 jugadoras, se quedaron sin Mundial. Y todas por la misma lesión.
“Todo se hace al revés cuando se trata del calendario. Estuve en algunas de estas reuniones, escuché el proceso y todavía no entiendo cómo, cuando algo está mal, se toma en serio. Es blanco y negro: no es la única causa de todas las lesiones, pero es, al 100%, una de las razones principales”, afirmó, con tristeza y contundencia a partes iguales, Leah en una entrevista concedida a The Telegraph.
El pasado 20 de agosto, la selección inglesa y la española se enfrentaron en la final del Mundial. Tras ese partido, y tras un curso agotador, muchas futbolistas se incorporaron a sus equipos sin apenas descanso. “Algunas chicas regresaron y tan sólo tuvieron cinco días libres. Cinco días libres tras la final de un Mundial”, responde enfadada la centrocampista.
Una situación «insostenible»
La estrella del fútbol inglés, e icono del deporte, se mostró muy crítica con la industria del fútbol y su organización, plagada de partidos: “Dedica un tiempo en el que ni el club ni el país puedan tocar a un jugador y déjalo descansar. Pero en lugar de eso, lo que hacemos es decir: ‘Tienes que jugar esto, esto, esto’ y luego decir: ‘Te daré dos días libres entre medio’. Es imposible. Es insostenible”.
Recientemente, la selección inglesa fue eliminada de la Nations League, por lo que no participará en los próximos Juegos Olímpicos. En ese momento, Leah se sorprendió a ella misma y fue consciente -todavía más- de la gravedad de sus pensamientos. “Es horrendo que una de las primeras cosas que me vino a la cabeza sobre los Juegos Olímpicos fue: ‘Al menos, probablemente, sus carreras durarán un par de años más o tres porque tendrán un verano libre. Todos necesitamos un descanso y, ahora, conseguirán uno’. ¿Cómo de horrendo es eso? Además, luego descubrí que, en realidad, no descansas porque tenemos un campamento en julio. Simplemente, creo que es ridículo. Y esto también ocurre en el fútbol masculino”, reflexionó.
En su entrevista en The Telegraph, una de las primeras veces en las que la futbolista habla tras su lesión, lanza una advertencia: “Tal y como se está abordando el fútbol femenino, será imposible aumentar los precios de las entradas ni que vaya más gente a los estadios, porque no habrá jugadoras a las que ver. Nos estamos hundiendo, hay que encontrar una solución, en términos de calendario, porque no es sostenible”. Además, comparó la situación con la NFL: “No quiero que, dentro de 10 años, el fútbol llegue a un punto en el que los equipos sean de 40 jugadoras y se parezca a la NFL. O que tengas un equipo en la primera mitad y otro en la segunda”, zanjó.
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