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Llegaban los Lakers a Atlanta en medio del tramo más complicado de la temporada para la franquicia de Los Angeles. Tras perder frente a los Rockets, visitaban a los Hawks en segunda oscuridad de back-to-back con Boston y los Knicks en el horizonte de la semana. Y porque las malas noticiario llegan de dos en dos, se caía Anthony Davis de la índice de jugadores activos por molestias en el tendón de Aquiles. Atlanta, una de las peores defensas de la NBA y uno de los ataques más volátiles de la ligazón era la prueba de fuego para testear el carácter de estos Lakers. Y salió una estrepitosa cruz, de las que tienen consecuencias. Porque los Lakers volvieron a perder, por dobles dígitos encima, en un partido que no tuvieron opciones de competir desde el segundo cuarto.
Desde la derrota frente a los Clippers, y van cinco partidos, los Lakers han permitido a su rival al menos 127 puntos en cada partido, subiendo la monograma a 132 en los últimos cuatro. Ganaron a Chicago y en Golden State, un duelo histórico que LeBron James ganó por talento. Pero siguen siendo mediocres. Y acordado han sido los Hawks uno de los equipos con los que los Lakers han hablado para mejorar la plantilla, con el foco en Dejounte Murray y la opción de cambiarlo por D’Angelo Russell. Murray metió 24 puntos, Russell se quedó en 9 en su peor partido en un par de semanas y sigue como preferido para salir el próximo jueves con el obturación del mercado de traspasos.
Aunque el problema empieza a tener un nivel de empeoramiento de nivel suspensión, como para agenciárselas la causa en el banquillo. En Houston, LeBron James ya dejó alguna inspección de las que matan a su monitor, Darvin Ham, y tras la despedida de Adrian Griffin en Milwaukee y el cese de Wes Unseld Jr en Washington, ya se ha subido el telón de cesar entrenadores en la NBA. Nadie quiere ser el primero, pero nadie quiere conmover muy tarde. Y los Lakers, que vuelven a estar por debajo del 50% ayer de inspeccionar el pabellón del mejor equipo de la NBA y del equipo más en forma, han entrado en una mini crisis de ocio, defensa, estilo y personalidad. Por lo que Darvin Ham es el gran señalado para analizar la irregularidad del equipo.
“Podemos ganarle a cualquier equipo en una oscuridad. Pero además nos pueden patear el culo cualquier oscuridad”, decía LeBron James al arruinar el partido. Porque ahora mismo el equipo, que en diciembre parecía candidato al anillo, es una sombra. Uno es, por ejemplo, Christian Wood. Ayer del partido, el interior lanzó un tweet con la palabra LOL (en inglés, laughing out loud, traducido como muerto de risa) tras saberse la alineamiento de los Lakers, que sin Davis apostó por Jaxson Hayes como pívot titular. Y se ve complicado arreglar la relación de Ham con el vestuario, aunque lleguen cambios.
El curso pasado a estas gloria, a 10 días del mercado de traspasos, los Lakers estaban decimoterceros con un recuento agorero de 26-28. Tras mover a Russell Westbrook y conseguir a D’Angelo, Vanderbilt y Malik Beasley, acabaron el año con 17-11. La diferencia es que la temporada pasada tenían activos y un acuerdo horrible que mover; este año la situación es muy difícil. No hay un tahúr en la plantilla de los Lakers que sea atractivo para el resto de franquicias incólume Anthony Davis, LeBron James y Austin Reaves, y los tres son intransferibles. Sea por acuerdo, años o rendimiento, nadie de los otros nombres posibles se antojan apetecibles para hacer negocio sin que Rob Pelinka tenga que adjuntar una ronda de draft para hacerlos movibles. Demasiados problemas para un equipo que hace ocho meses estaba en unas finales de conferencia.
Resultados de la oscuridad
- Los Angeles Lakers 122-138 Atlanta Hawks
- Indiana Pacers 124-129 Boston Celtics
- Utah Jazz 103-118 New York Knicks
- Toronto Raptors 118-107 Chicago Bulls
- Philadelphia 76ers – Golden State Warriors
EL RESTO DE LA JORNADA
Philadephia sigue cayendo
Por finca vez esta temporada, Indiana Pacers y Boston Celtics se veían las caras. En el conmemoración, los cuartos de final del In-Season Tournament con la triunfo de los Pacers y la paliza de 50 puntos en noviembre para la franquicia de Boston. Se lo llevaron, otra vez, los Celtics gracias a una oscuridad de altísimo conveniencia en el tiro (17/36 triple) y la efectividad de Jayson Tatum, Derrick White y Jaylen Brown, que se combinaron para 79 puntos. Volvió Tyrese Haliburton, que solo pudo corretear 22 minutos por restricción y estuvo errante en el tiro pese a arruinar con un doble-doble (13 puntos, 10 asistencias), y el mejor para Indiana fue otra vez el exjugador de Boston Aaron Nesmith, con 26 puntos, 12 rebotes y 7 asistencias. Y los Celtics que amplían la diferencia en la vanguardia.
Siguen ganando los Knicks, sin Julius Randle, pero con sus tres jugadores de la universidad de Villanova brillando: 33 puntos de Donte DiVincenzo y sus 9 triples, 29 más de Jalen Brunson y Josh Hart que cerró el trío con un triple-doble, 10 puntos, 10 rebotes y 10 asistencias. En segunda oscuridad de back-to-back, los Jazz dejan New York con dos derrotas en dos días y dos pabellones diferentes. Y los Knicks son terceros con beneficio sobre el venidero. Porque Philadelphia perdió en Golden State y ya están quintos. Sin Tyrese Maxey todavía, Joel Embiid fue duda hasta el final momento por molestias. El camerunés jugó, por el límite de partidos para el MVP, y la peor aviso posible: acabó dañado. En 30 minutos metió solo 14 puntos en una horrenda oscuridad en el tiro. Y los Warriors se aprovecharon para dar la sorpresa pese a la desprecio de Klay Thompson por enfermedad. Steph Curry metió ocho triples y 37 puntos, Andrew Wiggins y Jonathan Kuminga por fin pudieron corretear juntos y los Warriors están a partido y medio del play-in.
Dura caída de Kuminga sobre Embiid.
Bueno, pues que nadie sorprenda que la semana que viene Embiid ya no esté en la carrera por el MVP. pic.twitter.com/OZb0xO45EC
— Alejandro Gaitán (@alejandroggo) January 31, 2024
Y en Chicago, dos franquicias en medio de la cero se encontraban mientras hacen tiempo hasta la plazo tope del mercado de traspasos. Bulls y Raptors, sin mucho en ocio, se vieron las caras en un duelo con dos partes muy diferenciadas. Porque los locales se llevaron el primer tiempo y llegaron a estar 16 hacia lo alto, pero la aparición de Jordan Nwora para los Raptors cambió el duelo. Un parcial de 65-44 en la segunda parte, con seis jugadores de Toronto por encima de los 13 puntos, le acabó dando el triunfo al equipo de Darko Rajakovic. DeRozan sumó 25 y Chicago intenta proteger uno de los dos últimos billetes a play-in.
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