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Tras largos meses de conversaciones, dilatadas por procesos judiciales y apelaciones, la junta de acreedores de Nova Austral aprobó la reorganización de la empresa, culminando de manera positiva para la salmonera con un acuerdo entre las partes, mientras que la propiedad de la compañía será traspasada a los principales acreedores.
Desde la misma empresa emitieron una declaración pública en la cual anuncian que el acuerdo alcanzado representa “un paso más en el proyecto que busca darle viabilidad a esta empresa, una tarea en desarrollo que esperamos se consolide a futuro para que Nova Austral siga contribuyendo a la actividad económica y a la comunidad de Porvenir, con una producción de salmón de calidad comprometida con el respeto por el medioambiente y el entorno”.
De este modo, parte de la reorganización implicaría que el fondo noruego Altor -cuyo representante Tom Christian Jovik enfrenta querellas penales por parte de Moneda y los Solari- quedaría fuera de la firma y una comisión de acreedores asumirían al timón de la salmonera.
Seguiría, por tanto, un período de muchos trámites legales, entre los que se contempla este reordenamiento interno y cambio de propietarios.
Dentro de las primeras medidas que encargaron los bonistas junto con los inversionistas hacia el directorio, está un análisis de cómo se abordará la deuda tributaria.
Se evaluará si continuará la gerencia o si habrá cambios. Se adelantó que el proceso de reorganización sería lento, porque se deben ordenar las inversiones, los temas judiciales y la relocalización de los centros productivos.
Según se indicó a La Prensa Austral, en horas de la tarde los trabajadores sostuvieron ayer una reunión con la gerencia, en la cual se les informó que no habrá inyección de capital hasta que no se solucione el problema reciente de pagos de Iva.
Se les adelantó que habrá baja producción en los meses de marzo y abril, y entre mayo y septiembre y que en estos lapsos se trabajaría en un solo turno y, para compensar la menor producción, se compraría salmón a otras empresas.
Trabajadores
El punto de vista de los trabajadores fue manifestado por Tamara Martínez, secretaria del Sindicato de Trabajadores de Nova Austral, quien celebró la decisión señalando que “se ha aprobado favorablemente con un 92% de quienes tenían derecho a voto. Afortunadamente para los trabajadores, es una muy buena noticia y esperemos que esto represente un cambio importante y significativo en nuestro día a día, que mejoren nuestras condiciones de trabajo, que se gesten cambios importantes para poder mantener la tranquilidad en nuestros puestos de empleo”.
Alcalde Parada
Desde Porvenir, el alcalde José Gabriel Parada se pronunció respecto de esta medida, anunciando que “se llegó a un acuerdo casi unánime de la reorganización de la empresa. Eso despeja un poco los fantasmas de la quiebra y de la liquidación, deja en una condición más expectante a los trabajadores, que es el foco que hemos tenido las autoridades en el sentido de que había que buscar el resguardo de los empleos”.
A continuación, se estaría preparando un cronograma para el pago de los acreedores, dándole prioridad también a los locales, como los del rubro de alimentos, además de una inyección de recursos.
En la visión del alcalde Parada, este acuerdo representa una oportunidad para realizar cambios “en las políticas y en la administración de la empresa, pero también en las autoridades de la empresa”. En ese sentido, profundizó: “Creo que debe haber un cambio en la mirada y en la estrategia de cómo se va a desarrollar esta empresa. De los errores se aprende harto, pero aquí también hay que tomar algunas decisiones de buscar un nuevo rumbo en la salmonicultura. Hay que pensar en la matriz productiva, buscar un desarrollo armónico de Tierra del Fuego y Porvenir, no solo ser expectantes por el tema acuícola, sino buscar otras ramas de actividad económica que propendan al desarrollo de Porvenir y de la isla de Tierra del Fuego”.
Cabos sueltos
Sin embargo, aún quedan muchos cabos por atar. Como bien indica la empresa, se trata de un paso más en darle viabilidad al proyecto, pero aún quedan temas pendientes como los centros sancionados sin operación o situaciones tributarias con Aduanas y el Servicio de Impuestos Internos, producto de irregularidades registradas durante la administración anterior.
El Tribunal Ambiental había fallado a favor de la empresa y calificado de “desproporcionadas” las sanciones emitidas por la Superintendencia de Medio Ambiente respecto de los centros Cockburn 14 y Cockburn 23. Sin embargo, el órgano contralor apeló a la Corte Suprema, lo que sigue en trámite.
Además, hay operaciones que se encuentran cuestionadas por el Servicio de Impuestos internos, correspondientes a compras realizadas a algunos de los proveedores durante los años 2017 a 2019, y no durante la administración actual.
Desde la empresa informan que han estado realizando las diligencias ante el Servicio de Impuestos Internos para que dichas operaciones no sean cuestionadas y se le permita a la compañía utilizar los créditos tributarios respectivos, evitando un doble pago del Iva. A su vez, la compañía ha rechazado el cuestionamiento que ha hecho el Sii interponiendo en tiempo y forma todos los recursos administrativos y legales que establece el regulador.
Actualmente, se encuentra en tramitación un recurso de apelación ante la Corte de Apelaciones de Punta Arenas, cuya finalidad es intentar revertir el criterio adoptado por el Servicio de Impuestos Internos.
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