[ad_1]
El debate está más abierto que nunca. La portería del Real Madrid sigue mudando de inquilino ante las dudas de Ancelotti. Este miércoles fue Kepa el elegido para enfrentarse al Atlético en la Supercopa, un partido que no le hizo ningún favor al vasco y le ha vuelto a situar bajo los focos. No fue su mejor día, encajó tres goles y volvió a ‘fallar’ en el 2-3, una acción de Morata que terminó en autogol.
“Ha sido un buen partido de Kepa… pero para la final ya veremos a quién elegir”, dijo Ancelotti en rueda de prensa, sin ofrecer pistas de qué portero se medirá al Barcelona en la final del domingo. Tras las dudas de esta temporada parece más que razonable que Carletto consulte con su almohada la decisión más compleja en la presente temporada desde que se lesionó Thibaut Courtois. Aunque el entrenador blanco asegurase que no tenía previsto hacer rotaciones en una posición tan delicada.
El vacío del belga está dejando un agujero más grande del que imaginaba el cuerpo técnico del Madrid, que apostó decididamente por Kepa para que llegase cedido por el Chelsea el pasado verano. Su idea pasaba por no dar minutos a Andriy Lunin, pero sus notables actuaciones han cambiado la opinión de Ancelotti y su equipo. Hasta la fecha, Kepa ha disputado 17 partidos por los 10 que ha jugado el ucraniano esta campaña.
El problema para Kepa llegó tras lesionarse en el aductor a mediados de noviembre. Lunin aprovechó la oportunidad y ahora ha puesto en apuros a su compañero. Es ahí donde el cancerbero de Ondarroa evidencia problemas de confianza. A su vuelta, más dudas por ser el “centro de atención” en el debate mediático o entre los propios aficionados, que no tardaron en señalar en redes sociales su fallo en el tercer gol de anoche ante el Atleti. Está claro que le va mucho mejor si pasa desapercibido…
Es algo que ya le ocurrió en el Chelsea. Allí se convirtió en el portero más caro del mundo por el traspaso que pagó el equipo londinense (80 millones de euros). A día de hoy sigue siendo el arquero más costoso en la historia del fútbol y eso también fue un motivo de peso. A su llegada al Reino Unido, Kepa disputó 54 partidos -entre todas las competiciones- y dejó la portería a cero en 23 ocasiones.
Cifras que respaldaron la apuesta de los ‘blues’ por el exportero del Athletic. La temporada siguiente, aunque con menos partidos (41), Kepa siguió siendo el dueño y señor de la portería del Chelsea pero todo cambió en el verano de 2020, cuando los ingleses decidieron fichar a Edouard Mendy por las dudas generadas por el vizcaíno tras un error ante el Brighton en la primera jornada de Premier y otro clamoroso contra el Liverpool, regalándole un gol a Sadio Mané.
Frank Lampard, el entrenador del Chelsea por aquel entonces, defendió a Kepa públicamente, pero Mendy acabó llegando al club y se consolidó como titular. Aquellas dudas fueron clave para el técnico inglés, que alineó al senegalés en la cuarta jornada de la Premier y ya no lo quitó. Para colmo de Kepa, que fue suplente salvo en la FA Cup, los ‘blues’ conquistaron la Champions con el africano bajo palos.
En la temporada 2021-22 siguió a la sombra (15 partidos) pero le sirvió para recobrar la confianza tras la salida de Mendy a la Copa África. Esos partidos mejoraron su rendimiento y le dieron licencia para volver a ser titular la pasada temporada (39 encuentros) y para ofrecer su mejor versión lejos de todas las miradas. De hecho, el Madrid no tardó en acordarse de él el pasado verano.
Kepa, que fue elegido ‘Guante de Oro’ por la UEFA hace dos años, revive fantasmas de Stamford Bridge que vuelven a aparecer en Riad. A pesar de todo esto, el cuerpo técnico mantiene su confianza en el de Ondarroa y apunta a titular también en la final de este domingo contra el Barcelona.
[ad_2]
Source link