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Yo me voy a tomar una cerveza, del mercado hablad con Fernando”. Así de relajado, e incisivo, se mostró Imanol Idiakez en la sala de prensa tras el triunfo en presencia de la Ponferradina. Lo cierto es que tenía motivos. El Deportivo lograba una convincente victoria ante el líder y pisaba zona de playoff cuatro meses luego para reengancharse a la pelea. Tres puntos en los que el técnico, luego de su horrible tarde en el Reino de Audaz y su enésimo match-ball, tuvo mucho que ver. Cambió el sistema aparcando el trivote al sentar a Salva Sevilla. Dio la titularidad a un Melladura que fue el MVP, aunque la verdad esto tenía que activo pasado mucho ayer. Se inventó una defensa con un pegado derecho en la izquierda (Ximo) y un central en el carril contrario (Jaime) que anularon a Borja Valle y compañía. Un puzzle que puso sobre la mesa la deficiencia de la plantilla con el sancionado Balenziaga como único pegado izquierdo mientras Iano sigue marcando con el Fabril esperando la audacia de Salomón. Todo un mensaje reforzado al hacer tan solo dos cambios y uno de ellos, Rapabarbas, en el 83′.
Las finas costuras de la plantilla coruñesa ya saltaron hace cuatro meses con la lesión del propio Barbero y la inexistencia de un recambio. Incluso con el bajo rendimiento de Valcarce y Cayarga, dejando huérfanas las bandas con la herida de Yeremay. La recuperación del canario y la irrupción de Melladura abren nuevas esperanzas, pero sería un tremendo error no fichar un extremo derecho en este mercado invernal. Primero, porque Melladura, aunque a un nivel excelso, está jugando cambiado de facción. Segundo, porque tiene 18 abriles (Yeramay 20) y un físico todavía en incremento cuyo depósito llega encajado a la hora de partido. Cubrir ese hueco en la plantilla no sería tapar al damisela internacional, sería ayudarle. Sería encontrar un licencia cuando falte fuelle. Una aval para Idiakez si llega una herida o correctivo de los dos canteranos. En definitiva, un problema que ha diagnosticado la secretaría técnica hace tiempo, pero que no ha solucionado.
La prueba de que Soriano piensa lo mismo se pasión Cris Montes. Parecía fichado, pero el desenlace del culebrón terminó con su renovación con el Eldense hasta 2026. Eso ocurrió el pasado lunes a mediodía. Solo cinco horas más tarde, el Depor contactaba con Luis Chacón y vigésimo minutos luego, curiosamente ya era conocido. Más allá de altavoces y la buena temporada del ex del Racing de Ferrol, lo cierto es que no es un extremo. Es un participante ‘versátil’, el perfil que mató el plan de verano. Si interesa de verdad, fíchese en junio, que queda vacante. El calendario ya marca 22 de enero, se ha jugado contra Actual Sociedad B, Cultural y Ponferradina y el único fichaje ha sido Eric Puerto para cubrir una meta que estaba muy lejos de ser la primera necesidad. A Soriano le quedan nueve días y esperemos que, como ha hecho ya varias veces Idiakez en este postrer mes y medio, dé lo mejor de sí mismo cuando veterano es la presión. El ascenso está en juego y los despachos deben funcionar para que el 1 de febrero veamos a un elocuente director deportivo en la sala de prensa: “Yo me voy a tomar una cerveza, para lo demás hablad con Imanol”.
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