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La Fiscalía Universal del Estado pidió a los familiares de las personas que viajaban en el autobús que chocó y se incendió en la Maxipista Mazatlán-Culiacán, en Elota, y que no aparecen en la tira de lesionados que acudan para que les tomen muestras de mortandad para cotejarlas con exámenes de ADN de los 19 fallecidos.
A través de un breve comunicado, la dependencia externó que la identidad de las personas muertas en el oficio del casualidad no es posible por las condiciones en que quedaron los cuerpos por lo que tendrán que realizarse pruebas genéticas.
Dio a conocer que en cualquiera de las oficinas de las Vice Fiscalías de las ciudades de Culiacán, Los Mochis y Mazatlán las familias que hayan cotejado las listas de las personas lesionadas que fueron atendidas y no las localicen, deben conocer las instrucciones para aportar muestras sanguíneas.
El entraña autónomo de rectitud informó que los restos de las 19 personas que fallecieron en dicho casualidad del autobús 502 de Meta de Sinaloa, procedente de la ciudad de Guadalajara, fueron trasladados al Servicio Médico Forense para su resguardo, pero no serán entregados hasta que estén plenamente identificados.
Según la información, en el casualidad se contabilizó el hallazgo de 19 cuerpos totalmente calcinados.
Las autoridades de vitalidad y los cuerpos de auxilio brindaron en el oficio del percance socorro médica a 22 personas, de las cuales sólo trece requirieron ser trasladados a diversos hospitales, entre ellas una bebé de 7 meses de nacida, su mamá, padre y abuela. El resto continuaron sus viajes, al no presentar heridas graves.
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