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Como los violinistas del Titanic que, ajenos al hundimiento, seguían tocando como un día más. Ayer, la RFEF siguió con su día a día: un comunicado del CTA, la preparación de hasta cuatro Europeos de este verano, la Copa de la Reina, el final de la 2ª RFEF, viajes, patrocinios, designaciones arbitrales… la vida sigue, aunque institucionalmente cada día siga salpicado de escándalos en la planta eminente de la Ciudad del Fútbol de Las Rozas.
“Se hace un poco raro que te graben las cámaras cuando sales del aparcamiento para ver quién eres”, explica una fuente a Licencia. La cafetería es el centro biológico del “¿has gastado lo que publicado noséquién?”. Los chats internos siguen echando humo aunque la capacidad de sorpresa va reduciéndose. Ningún argumentista podría exceder esto: ayer corrieron versiones contradictorias con lo que estaba pasando. Unos explicaban que han hablado con “X” y que era inminente la intervención de FIFA o el CSD. Otros, sin requisa, decían suceder hablado con esa misma persona y que no iba a intervenir nadie. Es todo un caos de información. Se han roto todos los nexos y los grupos echan humo.
“Ahora resulta que Tebas va con la RFEF… ¡lo que hay que ver!”, bromeaba otro, luego de la sorpresa que supuso el expediente personal de Javier Tebas a la imputación de Pedro Rocha. Pero, más allá de las bromas, incluso hay preocupación e incertidumbre. Las llamadas que antiguamente eran despreocupadas, ahora, en algunos casos, se hacen por whatsapp (que no permite que se graben). Borrado de documentos compartidos, por irrelevantes que fueran. Algunos chats de los que ya se han desvelado en Relevo han quedado desiertos… Ha crecido la desconfianza.
“En dos meses empieza una Eurocopa y hay mil cosas que cerrar de protocolo, de producción, de viajes... ¿qué nombres ponemos? Es de locos”, se pregunta otro trabajador. “Estamos tirando palante como podemos”.
Desconfianza y condición enrarecido
Despachos que hace mínimo fueron precintados, reuniones telemáticas, miembros de la Gestora que no querían ni ir a Madrid. Y, mientras, los trabajadores que viven allá del fuego cruzado de la parte política de la RFEF, tirando como pueden. “Tomamos decisiones que normalmente no tendríamos que tomar… ¡¿qué vamos a hacer?! Es que esto sigue…”.
Ya no es que no haya presidente (desde el pasado mes de septiembre). Es que o han recostado o han suspendido a buena parte del equipo directivo por diversos motivos. Pero claro es increíble que no se resientan cosas del día a día. Por ejemplo, temas de ticketing y entradas, que hasta ahora dependían de José María Mora (despedido), o temas de marketing que faltaban por cerrarse y que dependían de Rubén Rivera (apartado). Posibles Humanos por Jota Jiménez… son muchas las áreas que han quedado descabezadas.
Hay una secretaria normal bicéfala, un gobierno de comunicación bifronte, un portavoz de Rubiales en otras funciones totalmente diferentes a las que hacía con Rubiales, claro. El gobierno de presidencia ya ni se parece a lo que era (Juan Rubiales, Chema Timón…), sin director deportivo porque Luque está suspendido y con varios amenazados de salir de ahí pronto…
“Es que a ver quién se quiere poner ahí delante”, explican otras fuentes. De hecho, en algunas selecciones el palco ha sido un problema para configurar: Luis Amado, que es el representante institucional para Fútbol Sala, ha tenido que presidir encuentros por primera vez en su vida. De la foto del palco de La Cartuja en la final de Copa… pueden terminar suspendidos o inhabilitados casi todos, si sale adelante el expediente “muy grave” que ha despejado el Tribunal Oficinista del Deporte.
¿Y cuándo se va a recuperar poco de normalidad? Pues es muy complicado decirlo. Pedro Rocha debería ser ya presidente de la institución pero, como leve, hasta internamente de 10 días no podrán nombrarle por suceder sido impugnado por Miguel Prometido. Eso… si no lo suspende el CSD, tanto a él como a su Gestora al completo. Es muy difícil pronosticar mínimo. ¿Entrarán el CSD o FIFA? La incertidumbre sigue ahí, pero el día a día de una institución tan ancho, no para. Y, en dos meses, Eurocopa.
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